Caleb Calloway: «Ojalá más artistas sigan a Bad Bunny y defiendan a su país, hay que usar el poder que da tener millones de seguidores»

Un vestíbulo con una pantalla gigante para jugar al FIFA recibe al visitante en los estudios Rimas , construidos en el barrio madrileño de la Guindalera por Rimas Entertainment, una de las compañías discográficas más poderosas de la escena urbana internacional. Cruzando una puerta insonorizada se accede a un pasillo lleno de guitarras (¿guitarras?) que da a las salas de grabación, donde uno puede ir fisgoneando por los ventanucos para ver a los artistas fraseando al micrófono entre calada y calada mientras su productor moldea su voz con el ratón del ordenador. Todos son jovencísimos, pero sólo uno es una megaestrella mundial. Caleb Calloway , artista puertorriqueño conocido por haber sido productor de luminarias como Bad Bunny , J Balvin, Rauw Alejandro, Young Miko, Anuel Aa o los españoles Quevedo y Saiko, ocupa uno de los estudios más amplios para grabar las nuevas canciones de su carrera solista tras la reciente publicación de 'Hayabusa', un álbum de debut plagado de colaboraciones de músicos a los que ha producido. Es un tipo tranquilo y amable, buen interlocutor, con una oratoria poco común en su escena. Y con unas ideas llamativamente claras sobre su futuro. ¿En qué está trabajando? Estuve en la Fashion Week de París, actuando en la fiesta de una marca de ropa donde me encontré con mi amigo Rauw Alejandro. Y he aprovechado para venir a Madrid una semana para trabajar en la segunda parte de mi disco 'Hayabusa', que se va a llamar 'Hayabusa After'. Me encanta trabajar aquí, me encanta la vibra, y además voy a incluir a un par de artistas españoles. Hayabusa es una marca de moto, ¿qué tiene de especial? Sí, es la moto que tenían todos los artistas grandes de Puerto Rico entre los años 2000 y 2005. Sale en muchos videoclips de reguetón de la época, como por ejemplo el de 'Gasolina' de Daddy Yankee . Yo quería apurar el sonido de esa época e implementarlo en un disco mío, y la 'Hayabusa' es como un símbolo de todo eso. ¿Cuál es la principal diferencia entre producir para otros y producirse a uno mismo? Hay un montón de diferencias. Un buen productor sabe introducir su propio mundo en el sonido que trae el artista, eso se ve muy bien en la evolución que han tenido los discos de Bad Bunny. Cuando conceptualicé el universo de 'Hayabusa', ya sabía hasta qué colores quería para los visuales, tenía todo claro, así que cuando llegaban los colaboradores al estudio fue fácil que entendiera en qué íbamos a trabajar. Me gustan los dos mundos, me encanta aportarle a otros, y me encanta que otros aporten a mi propio trabajo. ¿Se definiría como un productor de método, o con cada artista tiene que inventar uno nuevo? Depende. Hay artistas a los que les gusta que les mande las ideas con antelación, hay otros que prefieren llegar al estudio para empezar de cero, hay artistas que prefieren escuchar las pistas completas… Me he mantenido fuerte en esta industria porque he sabido adaptarme a cada situación. Sé cuándo debo hablar o no, cuándo opinar o no. Con algunos artistas sé que puedo meterme 'a full' y con otros sé que me tengo que echar un poco para atrás. Un buen productor es un como un coach, un guía. Eso es lo que te diferencia de un 'beatmaker'. ¿Cómo cree que va a influir la Inteligencia Artificial en su trabajo? Creo que va a sumar, no tengo ningún tipo de miedo a perder mi trabajo, o a que la IA sustituya a los artistas. Se le puede sacar provecho al crear sonidos, pero la creatividad tiene que estar en el artista o el productor, que son quienes le dicen lo que tiene que hacer. ¿Cómo era su trabajo a nivel de medios tecnológicos cuando empezó? Yo tengo treinta y pico años, así que empecé cuando no había ni redes sociales. Lo que aprendí, lo aprendí probando a darle a todos los botones. Ahora hay muchísima más información disponible para aprender, tutoriales, etc, pero por lo demás no ha cambiado tanto. Yo ahora mismo estoy trabajando en una sesión en la que todo parte de la guitarra. ¿Cómo es que ideó un nombre artístico inspirado en la leyenda del jazz Cab Calloway? ¡Nadie sabía esto! Llevo diez años de carrera y eres la primera persona que me lo dice. La gente cree que es mi nombre. Surgió en 2010, viendo un homenaje a Frank Sinatra en el canal de televisión History Channel. Yo en ese momento estaba buscándome un nombre para mi perfil de Instagram, todavía no sabía que iba a ser quien soy ahora en la música. Salió Cab Calloway, me llamó la atención y buscando canciones suyas encontré el 'hari hari hari ho', que ya había escuchado pero no sabía que era de él. Como dato curioso, hace un año me escribió su nieto por Instagram, me enseñó la página web de su abuelo y me dijo que me daba acceso libre a su catálogo. Me dio las gracias por rendir homenaje a su abuelo en el nombre, y quiero ir a conocerlo a Los Ángeles. ¿Cómo fue trabajar con Bad Bunny? Él tiene un círculo bien cerrado, trabaja con cuatro productores. Cuando yo trabajé con él en 'El último tour del mundo' estábamos en pandemia, así que lo hicimos a distan

Mar 25, 2025 - 13:39
 0
Caleb Calloway: «Ojalá más artistas sigan a Bad Bunny y defiendan a su país, hay que usar el poder que da tener millones de seguidores»
Un vestíbulo con una pantalla gigante para jugar al FIFA recibe al visitante en los estudios Rimas , construidos en el barrio madrileño de la Guindalera por Rimas Entertainment, una de las compañías discográficas más poderosas de la escena urbana internacional. Cruzando una puerta insonorizada se accede a un pasillo lleno de guitarras (¿guitarras?) que da a las salas de grabación, donde uno puede ir fisgoneando por los ventanucos para ver a los artistas fraseando al micrófono entre calada y calada mientras su productor moldea su voz con el ratón del ordenador. Todos son jovencísimos, pero sólo uno es una megaestrella mundial. Caleb Calloway , artista puertorriqueño conocido por haber sido productor de luminarias como Bad Bunny , J Balvin, Rauw Alejandro, Young Miko, Anuel Aa o los españoles Quevedo y Saiko, ocupa uno de los estudios más amplios para grabar las nuevas canciones de su carrera solista tras la reciente publicación de 'Hayabusa', un álbum de debut plagado de colaboraciones de músicos a los que ha producido. Es un tipo tranquilo y amable, buen interlocutor, con una oratoria poco común en su escena. Y con unas ideas llamativamente claras sobre su futuro. ¿En qué está trabajando? Estuve en la Fashion Week de París, actuando en la fiesta de una marca de ropa donde me encontré con mi amigo Rauw Alejandro. Y he aprovechado para venir a Madrid una semana para trabajar en la segunda parte de mi disco 'Hayabusa', que se va a llamar 'Hayabusa After'. Me encanta trabajar aquí, me encanta la vibra, y además voy a incluir a un par de artistas españoles. Hayabusa es una marca de moto, ¿qué tiene de especial? Sí, es la moto que tenían todos los artistas grandes de Puerto Rico entre los años 2000 y 2005. Sale en muchos videoclips de reguetón de la época, como por ejemplo el de 'Gasolina' de Daddy Yankee . Yo quería apurar el sonido de esa época e implementarlo en un disco mío, y la 'Hayabusa' es como un símbolo de todo eso. ¿Cuál es la principal diferencia entre producir para otros y producirse a uno mismo? Hay un montón de diferencias. Un buen productor sabe introducir su propio mundo en el sonido que trae el artista, eso se ve muy bien en la evolución que han tenido los discos de Bad Bunny. Cuando conceptualicé el universo de 'Hayabusa', ya sabía hasta qué colores quería para los visuales, tenía todo claro, así que cuando llegaban los colaboradores al estudio fue fácil que entendiera en qué íbamos a trabajar. Me gustan los dos mundos, me encanta aportarle a otros, y me encanta que otros aporten a mi propio trabajo. ¿Se definiría como un productor de método, o con cada artista tiene que inventar uno nuevo? Depende. Hay artistas a los que les gusta que les mande las ideas con antelación, hay otros que prefieren llegar al estudio para empezar de cero, hay artistas que prefieren escuchar las pistas completas… Me he mantenido fuerte en esta industria porque he sabido adaptarme a cada situación. Sé cuándo debo hablar o no, cuándo opinar o no. Con algunos artistas sé que puedo meterme 'a full' y con otros sé que me tengo que echar un poco para atrás. Un buen productor es un como un coach, un guía. Eso es lo que te diferencia de un 'beatmaker'. ¿Cómo cree que va a influir la Inteligencia Artificial en su trabajo? Creo que va a sumar, no tengo ningún tipo de miedo a perder mi trabajo, o a que la IA sustituya a los artistas. Se le puede sacar provecho al crear sonidos, pero la creatividad tiene que estar en el artista o el productor, que son quienes le dicen lo que tiene que hacer. ¿Cómo era su trabajo a nivel de medios tecnológicos cuando empezó? Yo tengo treinta y pico años, así que empecé cuando no había ni redes sociales. Lo que aprendí, lo aprendí probando a darle a todos los botones. Ahora hay muchísima más información disponible para aprender, tutoriales, etc, pero por lo demás no ha cambiado tanto. Yo ahora mismo estoy trabajando en una sesión en la que todo parte de la guitarra. ¿Cómo es que ideó un nombre artístico inspirado en la leyenda del jazz Cab Calloway? ¡Nadie sabía esto! Llevo diez años de carrera y eres la primera persona que me lo dice. La gente cree que es mi nombre. Surgió en 2010, viendo un homenaje a Frank Sinatra en el canal de televisión History Channel. Yo en ese momento estaba buscándome un nombre para mi perfil de Instagram, todavía no sabía que iba a ser quien soy ahora en la música. Salió Cab Calloway, me llamó la atención y buscando canciones suyas encontré el 'hari hari hari ho', que ya había escuchado pero no sabía que era de él. Como dato curioso, hace un año me escribió su nieto por Instagram, me enseñó la página web de su abuelo y me dijo que me daba acceso libre a su catálogo. Me dio las gracias por rendir homenaje a su abuelo en el nombre, y quiero ir a conocerlo a Los Ángeles. ¿Cómo fue trabajar con Bad Bunny? Él tiene un círculo bien cerrado, trabaja con cuatro productores. Cuando yo trabajé con él en 'El último tour del mundo' estábamos en pandemia, así que lo hicimos a distancia. Pero el tipo es tan inteligente que me enviaba notas de voz en las que me explicaba con todo detalle qué iba a pasar en cada canción. Es un tipo brillante, como lo es Rauw Alejandro, Álvaro Díaz, Young Miko, todos los artistas con los que he trabajado, que conceptualizan la música más que hacer… cualquier cosa. Su nuevo disco alerta de los peligros del neocolonialismo. ¿Cree que el mandato de Trump será positivo para Puerto Rico? El patriotismo se ha vuelto tendencia en Puerto Rico. Bad Bunny ha abierto la mente a muchas personas que no estaban tan pendientes de eso. Los puertorriqueños tenemos pasaporte estadounidense, pero el ICE (el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de EE.UU.) fue a Puerto Rico a sacar a los dominicanos… están pasando cosas bien locas. Sé que ese disco está creando conciencia, e influir culturalmente de esa manera es bonito. Espero que otros colegas tiren por ahí y entiendan que tienen la responsabilidad de defender a su país. Ya era hora de que la escena urbana tuviera más espíritu crítico. Había un miedo. Como estábamos tan marginalizados y no se nos tenía respeto, parecía que no podíamos ser quienes dieran ese golpe cultural, porque siempre hablamos de bailar en la disco y tal. Pero es el momento de usar ese poder que uno tiene como cantante con millones de seguidores. ¡Como si te gusta Trump! Lo importante es dar tu opinión, no ser un robot. Benito lo ha hecho, Rauw lo ha hecho, muchos artistas lo han hecho, pelear por los derechos de su gente. De los españoles con los que ha trabajado, ¿cuál le ha gustado más? Quevedo. Estuvimos trabajando en el estudio de Tainy en Miami haciendo un tema con Álvaro Díaz que se llama 'Quizás sí, quizás no'. Qué crack. Entre medias jugábamos al baloncesto, escribíamos unas barras, hablábamos de esto y lo otro… Me parece muy buena persona, su equipo de trabajo son sus amigos, y cuando fueron a Puerto Rico hace poco para los conciertos de Benito coincidimos también. Es alguien con quien me gusta estar, y un artistazo. ¿No cree que hay un poco de saturación de lanzamientos urbanos? Yo pienso que sí. Mira, Bruno Mars no ha sacado disco en ocho años. Nosotros vamos muy rápido, Feid sacó tres discos el año pasado… Hay que tener tiempo para tomar distancia. Yo intento trabajar un mes sí un mes no. Todavía no tengo la dicha de poder parar durante un año entero, me encantaría, pero seguro que acabaría haciendo música (risas). Pero sin tener que promocionar, dar entrevistas, actuar… Hay que cuidar la salud mental, el cuerpo. Los artistas deberían tomarse su tiempo un poquito más. ¿Qué productores ajenos a la escena urbana le parecen interesantes? Me encanta Rick Rubin. Él es del tipo de productor que puede influir mucho en una canción sin tocar una sola tecla. Yo cuando empiezo un tema, busco la melodía, pero hay un momento en el que me echo para atrás, dejo de enfocarme en lo que está pasando en la computadora, y tengo que escuchar, ver cómo movemos esto o aquello, si estamos grabando en el sitio adecuado o es mejor ir a otro… mantener el temple de tener una vibra buena. Como hacen Kanye West, Eduardo Cabra, Pharell, Ryan Leslie… ¿Qué opina de la separación entre Grammy y Grammy Latino? Hay dos maneras de verlo. Por un lado parece que quieren separarnos. Pero si se unieran en uno, habiendo tanta música, perderíamos mucha representación. Por ese lado lo veo bien. Lo que me molesta es que alguien piense que los Grammy anglo son más importantes. Para mí es lo mismo. Me han nominado a los Grammy anglo a Best Urban Album por el disco en el que he trabajado con Young Miko, ¡y la gente lo ha celebrado más que si me hubieran dado un Grammy Latino! Y no lo entiendo, porque nosotros tenemos más música, más cultura, más países representados en los Grammy Latinos. Hay que dejar de pensar que el gringo es mejor, cosa que pasa mucho en Puerto Rico por el efecto colonial, que hace que lo de fuera se considere mejor ya venga de Estados Unidos o de España. ¿Con quién sueña trabajar? Me encanta Judeline. Fui a su concierto hace unos días y me gustó mucho. La conozco, es amiga, ella ya lo sabe así que estamos esperando el momento adecuado. Creo mucho en ella. Para terminar... ¿cuál sería el 'junte' que más arrasaría ahora mismo? Rihanna y Bad Bunny, o Bruno Mars y Rauw Alejandro.