Las feministas que recibieron a Gérard Depardieu a la llegada a los juzgados: "Nadie es intocable"

Gérard Depardieu entró este lunes en el tribunal de París por uno de los accesos laterales, lejos de la multitud de cámaras y de las decenas de manifestantes feministas que le esperaban ante la puerta principal del palacio de justicia de la capital francesa. Varias asociaciones habían anunciado la víspera su presencia en sede judicial para “expresar su ira” contra los autores de violencias machistas y “expresar el apoyo a las víctimas”.

“Estamos aquí para apoyar a las dos personas que han denunciado a Gérard Depardieu, que se han atrevido a presentar una querella contra él. Es importante demostrar que nadie es intocable”, subrayó Louise-Anne Baudrier, portavoz de la Fondation des Femmes, ante los periodistas. Las activistas entonaron eslóganes como “Violencias sexistas, justicia cómplice”, “Víctimas os creemos, violadores os vemos”. En sus pancartas se podían leer consignas como “No a la cultura de la violación” o “Lo que nos llenaría de orgullo sería tener una justicia ejemplar”, en referencia a unas declaraciones de Emmanuel Macron que considera a Depardieu como “un orgullo para Francia”.

El juicio contra el actor debería haber comenzado el pasado octubre, pero la defensa de Depardieu consiguió su retraso presentando los certificados médicos sobre su estado de salud. En concreto, su abogado alegó las secuelas de una operación de cuádruple bypass y una diabetes, dolencias agravadas por el estrés del inminente juicio. Esta vez, una evaluación decretada por el tribunal lo ha declarado apto para comparecer ante la Justicia.

El proceso que se ha abierto este lunes en París es en realidad el primer acto de una larga serie judicial que espera a uno de los grandes iconos del cine francés. En agosto de 2024, la fiscalía de París solicitó que Gérard Depardieu fuera juzgado ante un tribunal penal acusado de violación y agresión sexual por la actriz Charlotte Arnould, la primera mujer en presentar una denuncia contra Depardieu, en 2018. La periodista, fotógrafa y escritora española Ruth Baza también le ha denunciado por los mismos actos, tras contarlos en la prensa española aunque, en su caso, los hechos estaban prescritos. En los últimos seis años, una veintena de mujeres han declarado públicamente haber sufrido comentarios sexistas o agresiones sexuales. En total se han presentado seis denuncias por estos hechos, siendo una de ellas la desestimada.

Depardieu está además envuelto en una batalla legal y mediática en relación a la emisión de un reportaje en el programa de investigación de la televisión pública Complément d'enquête emitido en diciembre de 2023. Los periodistas consiguieron acceso a material rodado por el escritor Yann Moix durante el rodaje de un documental en Corea del Norte, en el que Moix y Depardieu hacen comentarios sexuales crudos sobre muchas de las mujeres con las que se cruzan en su viaje. Además, los medios franceses han revelado recientemente que el actor también es objeto de una investigación preliminar por fraude fiscal y blanqueo de capitales, en relación a su domiciliación fiscal fuera de Francia para evitar impuestos.

“Provocador, desbordante, a veces grosero”

Este lunes Depardieu no hizo declaraciones a su entrada en sede judicial. De hecho se mantiene alejado de las cámaras y su única declaración sobre las acusaciones que pesan sobre él data de una tribuna publicada en 2023 en el diario Le Figaro. “Nunca jamás he maltratado a una mujer. Hacer daño a una mujer sería como dar una patada en el estómago a mi propia madre”, afirmaba en el texto, en el que no obstante, reconocía haber sido “provocador, desbordante, a veces grosero”.

Su abogado, Jérémie Assous, reiteró el lunes en una entrevista en la radio RMC que su cliente se considera “víctima de acusaciones totalmente falsas”, que ha negado “desde un principio”. En octubre, el aplazamiento de la vista no impidió a Assous comenzar su alegato, entre las protestas de la acusación y llamadas de atención del juez, “causando estupor en la sala”, según relató un periodista el diario Le Parisien. Assous tachó la acusación de “pseudoagresión” e ironizó sobre el hecho de que una de las denunciantes hubiera publicado fotos en redes sociales con el actor, “quizá para mantener vivo el trauma”, afirmó el abogado.

El martes tendrá lugar la segunda y última sesión del juicio.

Acompañamiento judicial de las víctimas

Precisamente la dureza del recorrido judicial que muchas de las denunciantes sufren para demostrar los hechos es uno de los elementos que las asociaciones feministas quieren visibilizar, para que la Justicia evolucione hacia un mejor tratamiento de las víctimas.

Asimismo, reclaman mejoras sistémicas a la industria del cine. “Es necesario que todas las empresas, incluidas las de la industria cinematográfica, que todos los directores, las producciones, etc. puedan poner en marcha más planes de detección e identificación de riesgos”, subrayó Louise-Anne Baudrier. “Es muy importante que también haya una garantía para las personas cuando se atreven a denunciar, de que pueden conservar sus puestos de trabajo”.

El proceso Depardieu se inicia en un contexto de debates sobre las violencias machistas en el cine francés. Una comisión parlamentaria se puso en marcha en mayo del año pasado, poco después del testimonio público de Judith Godrèche en el que denunciaba a los directores Benoît Jacquot y Jacques Doillon por violencias sexuales cuando ella era menor.

Desde entonces los diputados han recogido testimonios e información para identificar el riesgo de abuso y la violencia sexual que que sufren los profesionales —especialmente los menores— en los platós de cine. Los trabajos de esta comisión están a punto de concluir y está previsto que publiquen un informe final el 9 de abril.