Cornada a Damián Castaño en la primera corrida de la temporada en Las Ventas
Asustaba con su presencia la corrida de Adolfo Martín. Y un toro, el quinto, no perdonó a Damián Castaño cuando probaba el pitón zurdo. Rápidamente, se lo llevaron a la enfermería para operarlo de uan cornada en el muslo. La daga había calado. Con la montera calda instrumentó su faena el salmantino con un toro de nombre Revoltoso que se lo pensaba mucho que pesaba mucho para estar delante. Un bárbaro par había colocado Juan Sierra, que se había desmonterado. Desde que apareció pro chiqueros se vio que el cárdeno no iba a regalar nada: ya en el embroque se revolvía mientras Damián lo desafiaba. En el hule acabó mientras Rafael de Julia se hacía cargo de su muerte.
Asustaba con su presencia la corrida de Adolfo Martín. Y un toro, el quinto, no perdonó a Damián Castaño cuando probaba el pitón zurdo. Rápidamente, se lo llevaron a la enfermería para operarlo de uan cornada en el muslo. La daga había calado. Con la montera calda instrumentó su faena el salmantino con un toro de nombre Revoltoso que se lo pensaba mucho que pesaba mucho para estar delante. Un bárbaro par había colocado Juan Sierra, que se había desmonterado. Desde que apareció pro chiqueros se vio que el cárdeno no iba a regalar nada: ya en el embroque se revolvía mientras Damián lo desafiaba. En el hule acabó mientras Rafael de Julia se hacía cargo de su muerte.
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