Así reinventa Blancanieves (2025) el final del clásico animado de Disney

La película Blancanieves de Disney no solo trae de vuelta uno de los cuentos más icónicos del estudio, sino que también reimagina su final con una sorprendente modernización que mantiene la esencia del clásico animado de 1937, al tiempo que adapta sus valores y narrativa al público contemporáneo.

Protagonizada por Rachel Zegler como Blancanieves y Gal Gadot como la Reina Malvada, esta nueva versión dirigida por Marc Webb introduce cambios sutiles y profundos, en especial en su tercer acto y desenlace, que aportan mayor agencia a su heroína, revalorizan el papel de los enanos y desarrollan una visión renovada del clásico «felices para siempre».

Atención SPOILERS de Blancanieves (2025)

En la cinta original de 1937, Blancanieves era envenenada con una manzana por la Reina disfrazada de anciana. Tras caer en un sueño profundo, era despertada por el beso del Príncipe, en un acto de amor verdadero que resolvía mágicamente el conflicto.

En la nueva versión, ese momento clave se respeta en parte: la Reina Malvada logra engañar a Blancanieves con la manzana envenenada, pero la protagonista tiene un papel mucho más activo en el clímax.

Después de que su amor, Jonathan, la despierte con un beso (acto que sigue teniendo valor simbólico en la historia), Blancanieves no se limita a celebrar su rescate, sino que regresa a su reino decidida a reclamar lo que le pertenece. Enfrenta directamente a la Reina frente al pueblo, en un momento de catarsis y justicia que reemplaza la persecución final de los enanos de la versión animada.

La caída de la Reina Malvada… y algo más

Uno de los cambios más impactantes es la nueva forma en la que muere la Reina Malvada, interpretada por Gal Gadot. En lugar de caer desde un acantilado, como en la versión animada, la Reina intenta destruir su propio espejo mágico tras ser desenmascarada públicamente.

Este acto rompe el vínculo que tenía con sus poderes oscuros, y como consecuencia, su cuerpo se desintegra en cenizas, que son absorbidas por el misterioso plano dentro del espejo. Esta secuencia de Blancanieves, cargada de simbolismo visual, sugiere que la magia tiene reglas más profundas que podrían explorarse en futuras historias.

El espejo se reconstituye solo, insinuando que la fuente de poder de la Reina puede estar lejos de haber desaparecido por completo, abriendo una sutil posibilidad de expansión del universo mágico del filme.

Un nuevo significado para «la más bella del reino»

Una de las actualizaciones más interesantes del guion de Blancanieves es el cambio de significado de la clásica frase “la más bella del reino”. En el filme original, el espejo simplemente se refería a la belleza física de Blancanieves. Pero en esta versión, el concepto de “justa” o “fair” se conecta también con la noción de justicia y liderazgo.

Blancanieves no solo es hermosa por fuera, sino que demuestra una empatía, liderazgo y sentido de comunidad heredado de sus padres, reyes justos y compasivos. Eso es lo que realmente la convierte en una amenaza para la Reina: no su rostro, sino su capacidad de unir al pueblo.

El destino de los enanos y la sorpresa de Tontín

En esta nueva adaptación, los enanos también tienen un papel renovado. Aunque siguen siendo personajes secundarios, su desarrollo individual es más claro.

En particular, Tontín tiene una transformación conmovedora. De ser un personaje mudo e ingenuo, en el clímax rompe su silencio y pronuncia unas palabras en defensa de Blancanieves, ganándose el respeto del reino.

Al final, se revela que Tontín ha sido el narrador de toda la historia, dando un giro emocional al cierre del filme. Los enanos, que hasta entonces vivían alejados del mundo humano, se integran al reino y participan de la celebración final, dejando atrás su aislamiento.

Una heroína moderna, sin perder la esencia clásica

Blancanieves, interpretada con dulzura y firmeza por Rachel Zegler, es una versión actualizada del personaje que no necesita ser salvada constantemente, sino que lidera su propia historia.

Aunque conserva el tono soñador, artístico y tierno que definió al personaje original, esta nueva Blancanieves no teme enfrentarse a la injusticia y reclamar su lugar como líder legítima de su pueblo.

Al final del filme, es coronada como Reina, y el reino entero celebra su liderazgo mientras suena una emotiva reprise del tema musical «Good Things Grow», marcando el renacer del lugar tras los años oscuros de la Reina.

¿Habrá secuela?

Aunque el final cierra de forma clara y satisfactoria, la película deja abiertas algunas puertas para futuras historias. En especial, se menciona de forma breve la existencia de un «reino rival en el sur» y se plantea que la Reina utilizó esa supuesta amenaza para justificar la trampa que terminó con la vida del rey.

También se intuye que la magia del espejo aún contiene secretos que podrían explorarse más adelante, ya sea en una secuela directa o incluso en una expansión del universo de cuentos clásicos de Disney en versión live-action. Así que todo dependerá de la recaudación, pero como se han gastado tanto dinero, puede que no sea rentable.

Un mensaje relevante y atemporal

Más allá de las escenas de acción, el vestuario o las interpretaciones estelares, Blancanieves (2025) deja un mensaje claro: la verdadera belleza está en el carácter, la justicia y la empatía.

Esta adaptación no intenta «destruir» el legado del clásico animado, sino reinterpretarlo con sensibilidad contemporánea, manteniendo los elementos que han hecho de esta historia un clásico universal, pero dotando a sus personajes de mayor profundidad emocional y agencia narrativa.

Gal Gadot brilla en un papel inesperado

La Reina Malvada interpretada por Gal Gadot ha sido uno de los puntos más comentados. Alejada de los papeles heroicos que suele interpretar, Gadot entrega una villana elegante, obsesiva y progresivamente más desequilibrada. Su caída final es tanto una consecuencia lógica de su vanidad como una metáfora sobre los peligros de obsesionarse con la imagen.

Blancanieves no solo moderniza una historia que ha sido contada durante generaciones, sino que lo hace manteniendo el alma del cuento original. La combinación de música, magia, mensaje y evolución de personajes la convierten en una versión ideal tanto para quienes crecieron con la animación de 1937 como para las nuevas audiencias.

Recuerda que puedes ver la versión clásica en Disney Plus.

Esta noticia ha sido publicada por Cinemascomics.com