Fallece trágicamente Abílio Pinto, conocido por todos como «Billy Boy»

Abílio Pinto, una de las figuras más destacadas en la historia del surf en Portugal, ha fallecido recientemente tras una valiente lucha contra el cáncer. Apodado cariñosamente como «Billy Boy», su impacto en el mundo del surf trascendió la fabricación de tablas: fue un verdadero maestro del oficio, un pionero en la industria del shape en su país y un surfista apasionado, especialmente en condiciones extremas.

Su legado, construido a lo largo de más de 40 años, seguirá vivo en cada tabla creada y en cada persona que inspiró. Desde sus inicios en Vila Nova de Gaia hasta su vida en Madeira, Billy dedicó su existencia al mar y a perfeccionar el arte del shape.

Desde los 10 años, influenciado por su hermano mayor, se adentró en el mundo del surf. En 1982, con recursos limitados y en un contexto donde los materiales eran difíciles de conseguir en Portugal, fabricó su primera tabla. Este primer intento fue el inicio de una trayectoria que lo llevaría a fundar Golfinho Surf Designs, la icónica Billy Surfboards y, más recientemente, MAD Boards.

«Ser shaper no es solo una profesión, es una forma de arte», solía decir con pasión. Su incansable deseo de innovar lo llevó a recorrer el mundo, visitando lugares como Hawái, California, Sudáfrica y Australia, donde aprendió de figuras legendarias como Peter Daniels.

Con los conocimientos adquiridos en sus viajes, contribuyó a profesionalizar el shape en Portugal y formó a nuevas generaciones de shapers, defendiendo siempre la esencia del trabajo artesanal. Su influencia fue crucial para la evolución de la cultura del surf en su país.

Pero Billy no era solo un maestro del shape, también era un surfista audaz. En los años 90, durante el Billabong Madeira Challenge, demostró su valentía en condiciones extremas, dejando una huella imborrable en la memoria de quienes lo vieron desafiar olas imponentes.

A pesar de su talento y contribuciones, Billy siempre se mantuvo alejado de los reflectores, fiel a su estilo de vida discreto y centrado en su pasión por el mar. Su compromiso, visión y generosidad lo convirtieron en una figura irreemplazable dentro del surf portugués.

«Estamos creando nuestra propia cultura surf en Portugal», declaró en una de sus últimas entrevistas. Y sin duda, él fue uno de sus principales arquitectos.

Descanse en paz, Abílio Pinto. Su legado seguirá deslizándose sobre las olas.