Pensaba que no se escucharía, pero… El comentario en voz baja del novio de Makoke en ‘Supervivientes’ que deja por los suelos a la pareja

Makoke, entre la aventura y la incertidumbre.

Makoke, conocida por su paso por los platós y por ser exmujer de Kiko Matamoros, ha dado el salto a una experiencia que llevaba años deseando: participar en Supervivientes. Tal como Jorge Javier Vázquez ha recordado varias veces durante la gala de este jueves, la colaboradora llevaba «años luchando por convertirse en concursante de Supervivientes». Pero su aventura en Honduras podría tener un abrupto final tras una aparatosa caída.

Durante una de las pruebas del concurso, Makoke sufrió una lesión que la dejó completamente fuera de juego. Los gritos de dolor y su rostro desencajado mientras era trasladada en camilla hicieron saltar todas las alarmas. «Su continuidad está en el aire y esta noche vamos a revelar la decisión del equipo médico después de haberse sometido a exhaustivas pruebas médicas», anunciaba Jorge Javier.

La escena fue dura para el público y también para ella, que revivió el momento con angustia. Aunque asegura encontrarse mejor y ya no tener dolor, también confesó que se asustó mucho al ser evacuada en helicóptero. «Yo estoy bien, pero quiero saber qué dicen las pruebas médicas, pensaba que me había quedado tetrapléjica cuando vi que me sacaban de aquí en helicóptero», dijo visiblemente afectada.

Confesiones inesperadas desde el helicóptero.

Esa mención al helicóptero fue justo la chispa que necesitaba Jorge Javier para sacar su vena más irónica. «Una curiosidad, ¿estás acostumbrada a ir al médico en helicóptero?», preguntó con malicia. Makoke, con humor, respondió: «No, hombre, no es la primera vez que me monto, pero para ir al médico sí».

La conversación derivó entonces en una confesión inesperada. Jorge ya sabía la respuesta, como suele pasar, y empujó un poco más. «La primera vez fue en Miami, pero no viene a cuento, fue con Julio Iglesias… La primera vez que me enseñó Miami, pero no viene al caso», confesó entre risas.

Como era de esperar, Jorge no soltó el hueso. «Pero, ¿Miami es bonito en helicóptero?», insistió. «Sí, muy bonito, y Honduras también, pero más bonito es Madrid y mi novio», dijo Makoke, en un intento por devolver el foco a su presente sentimental.

El comentario que lo cambió todo.

Sin embargo, Jorge Javier fue un paso más allá, lanzando la pregunta que todos esperaban: «Cuando Julio Iglesias te enseñaba Miami desde el helicóptero, ¿te ponía canciones suyas?» La frase, aunque dicha en tono de broma, no cayó del todo bien a uno de los presentes.

Gonzalo, actual pareja de Makoke y defensor suyo en plató, no pudo evitar reaccionar, aunque lo hizo de forma disimulada. Las cámaras lo captaron murmurando un claro «joder, qué pesado…». Lo dijo entre risas, sin aparente mala intención, pero el gesto quedó registrado.

Ajena a esta reacción, Makoke siguió con su relato, recordando que Julio Iglesias no le cantaba en el helicóptero, sino en el coche. Un comentario inocente que contrastaba con el gesto incómodo de su pareja, quizá molesto por el protagonismo que de repente había tomado un ex célebre en plena gala.

Entre el dolor y la emoción.

Mientras se espera la decisión médica, Makoke sigue luchando por quedarse. Ha dejado claro que quiere continuar, que no le duele nada, y que no está dispuesta a abandonar ahora que por fin ha encontrado su lugar en el concurso. El público la apoya y los aplausos le devolvieron la sonrisa.

«Muchísimas gracias por los aplausos. Cuando entré en Supervivientes solo me lo tomé como un trabajo en la tele, un concurso al que tenía que ir. Pero este ‘reality’ me ha dado una guantá sin manos, estoy haciendo cosas que ni yo me reconozco», dijo entre lágrimas.

Un defensor que no la defiende.

Sin embargo, en medio de esta emotiva defensa de su permanencia, el foco vuelve inevitablemente sobre su pareja. Gonzalo, elegido por ella misma como su defensor en plató, no ha estado a la altura de las circunstancias. Su comentario, por muy informal o espontáneo que fuera, ha sido interpretado como una falta de respeto. Y en televisión, los gestos cuentan tanto como las palabras.

Makoke confió en él para representarla, para ser su voz y su apoyo mientras ella se dejaba la piel en la isla. Pero la reacción que tuvo ante las bromas del presentador lo ha pintado como una figura incómoda, poco preparada para manejar la presión mediática. En un programa donde cada detalle cuenta, su actitud ha levantado críticas.

La caída de Makoke fue física, pero la de Gonzalo ha sido más sutil y mediática. En un momento en el que ella más necesita aliados que sumen, su principal apoyo ha restado. Y aunque ella no lo sabe todavía, la elección de su defensor podría haber sido su único gran error en esta aventura.