Edoardo De Angelis y Sandro Veronesi: Comandante
Idioma original: italianoTítulo original: ComandanteAño de publicación: 2023Traducción: Juan Manuel Salmerón ArjonaValoración: recomendable Recomendable y, sobre todo, humanista y hasta entrañable novelita que recrea un hecho real, un episodio sucedido durante la II Guerra Mundial, cuando, en octubre de 1940 el submarino italiano Cappellini hundió en aguas del atlántico al carguero belga Kabalo que transportaba material militar británico (quizás el término "humanista" no sea el más apropiado para esta historia... o tal vez sí; seguid leyendo...). La peculiaridad de este suceso se debe a que, tras el exitoso ataque, el comandante del submarino, el veterano Salvatore Todaro, contraviniendo las órdenes del almirantazgo alemán, acudió en ayuda de los supervivientes, no ya una, sino en tres ocasiones -los cabos con los que remolcabna la lancha de los belgas se rompieron- llegando por fin a acogerles dentro del abarrotado submarino, con el objeto de trasladarles a las islas Azores, a pesar de que de esta forma su nave se convertía en un objetivo fácil para los aviones de la RAF.Vale, ya digo que "humanista" o "humanitario", dado que se trata de una historia bélica y, además protagonizado por el bando de los malos (no sé si el otro era muy bueno, pero no tengo dudas de la iniquidad de los fascistas, aunque Todaro y sus hombres tampoco lo fueran), no es el adjetivo más adecuado, pero, sin duda, sí que es una historia muy humana, en el sentido en que se utiliza popularmente este término, ya que muestra un comportamiento cuando menos compasivo hacia los vencidos, pese a que momentos antes habían tratado de matarse unos a otros. Es entrañable, además y hasta quizás algo naif, la razón que da el comandante del submarino para su decisión de rescatar y dar buen trato a los supervivientes del barco hundido: "Porque somos italianos" (el que esto escribe, que es italianófilo desde siempre, no puede por menos que sonreír satisfecho, pero, al mismo tiempo, recuereda que por aquel entonces detentaban el poder en Italia Mussolini y su banda de maleantes y que los métodos para obtenerlo y conservarlo fueron cualquier cosa menos "humanos" o "humanitarios". Y no eran menos italianos, aquéllos). Contribuye la empatía que se siente hacia los personajes el hecho de que la novela esté escrita desde multitud de puntos de vista, distintos tripulantes del submarino o la esposa de Todaro, pero también marinos del carguero belga, sobre todo el segundo de a bordo, un tal Reclerq, que, mira tú por dónde hablaba italiano y servía de intérprete entre los capitanes.Hasta aquí, podemos decir que Comandante se trata de una novelita amena y fácil de leer -los capítulos son bastante breves, además- sobre un episodio de tantos, si bien peculiar, que ocurrieron durante la guerra mundial. Ahora bien, la intención de los autores del libro, el escritor Sandro Veronesi y el cineasta Edoardo De Angelis va o iba más allá de esto. A raíz de la crisis migratoria que tuvo lugar en el Mediterráneo central en 2019, con cientos de personas que trataban de llegar a las costas italianas ahogadas en el mar ante la prohibición de rescate por parte de las autoridades (si no me equivoco, el Ministro del Interior y Vicepresidente por aquel entonces, igual que ahora, era el infame Salvini), en contra del criterio del propio almirante de la Guardia Costera, el intento de criminalización de las ONGs que acudían al rescate, la ola de xenofobia en la sociedad, etc., Veronesi creó con amigos suyos un movimiento que llamo "Cuerpos" para oponerse a la política al respecto del gobierno italiano. Entre estos amigos estaba el director de cine napolitano Edoardo De Angelis, con quien, al conocer el conmovedor antecedente que suponía la historia del comandante Todaro (de ahí, por cierto, que no resulte tan naíf, en realidad, la frase de "Somos italianos", sino cargada de intención ante los nacionalistas xenófobos), decidieron investigar sobre ella y, al cabo, escribir un guión de cine. Y no sólo un guión, sino también esta estupenda novela (que no es la novelización de aquel, que conste, sino una obra literaria por derecho propio). La película, por cierto, se estrenó en 2023, con un apropiado y seguramente estupendo, como de costumbre (yo aún no la he visto) Pierfrancesco Favino como el comandante Salvatore Todaro.

Título original: Comandante
Año de publicación: 2023
Traducción: Juan Manuel Salmerón Arjona
Valoración: recomendable
Recomendable y, sobre todo, humanista y hasta entrañable novelita que recrea un hecho real, un episodio sucedido durante la II Guerra Mundial, cuando, en octubre de 1940 el submarino italiano Cappellini hundió en aguas del atlántico al carguero belga Kabalo que transportaba material militar británico (quizás el término "humanista" no sea el más apropiado para esta historia... o tal vez sí; seguid leyendo...). La peculiaridad de este suceso se debe a que, tras el exitoso ataque, el comandante del submarino, el veterano Salvatore Todaro, contraviniendo las órdenes del almirantazgo alemán, acudió en ayuda de los supervivientes, no ya una, sino en tres ocasiones -los cabos con los que remolcabna la lancha de los belgas se rompieron- llegando por fin a acogerles dentro del abarrotado submarino, con el objeto de trasladarles a las islas Azores, a pesar de que de esta forma su nave se convertía en un objetivo fácil para los aviones de la RAF.
Vale, ya digo que "humanista" o "humanitario", dado que se trata de una historia bélica y, además protagonizado por el bando de los malos (no sé si el otro era muy bueno, pero no tengo dudas de la iniquidad de los fascistas, aunque Todaro y sus hombres tampoco lo fueran), no es el adjetivo más adecuado, pero, sin duda, sí que es una historia muy humana, en el sentido en que se utiliza popularmente este término, ya que muestra un comportamiento cuando menos compasivo hacia los vencidos, pese a que momentos antes habían tratado de matarse unos a otros. Es entrañable, además y hasta quizás algo naif, la razón que da el comandante del submarino para su decisión de rescatar y dar buen trato a los supervivientes del barco hundido: "Porque somos italianos" (el que esto escribe, que es italianófilo desde siempre, no puede por menos que sonreír satisfecho, pero, al mismo tiempo, recuereda que por aquel entonces detentaban el poder en Italia Mussolini y su banda de maleantes y que los métodos para obtenerlo y conservarlo fueron cualquier cosa menos "humanos" o "humanitarios". Y no eran menos italianos, aquéllos). Contribuye la empatía que se siente hacia los personajes el hecho de que la novela esté escrita desde multitud de puntos de vista, distintos tripulantes del submarino o la esposa de Todaro, pero también marinos del carguero belga, sobre todo el segundo de a bordo, un tal Reclerq, que, mira tú por dónde hablaba italiano y servía de intérprete entre los capitanes.
Hasta aquí, podemos decir que Comandante se trata de una novelita amena y fácil de leer -los capítulos son bastante breves, además- sobre un episodio de tantos, si bien peculiar, que ocurrieron durante la guerra mundial. Ahora bien, la intención de los autores del libro, el escritor Sandro Veronesi y el cineasta Edoardo De Angelis va o iba más allá de esto. A raíz de la crisis migratoria que tuvo lugar en el Mediterráneo central en 2019, con cientos de personas que trataban de llegar a las costas italianas ahogadas en el mar ante la prohibición de rescate por parte de las autoridades (si no me equivoco, el Ministro del Interior y Vicepresidente por aquel entonces, igual que ahora, era el infame Salvini), en contra del criterio del propio almirante de la Guardia Costera, el intento de criminalización de las ONGs que acudían al rescate, la ola de xenofobia en la sociedad, etc., Veronesi creó con amigos suyos un movimiento que llamo "Cuerpos" para oponerse a la política al respecto del gobierno italiano. Entre estos amigos estaba el director de cine napolitano Edoardo De Angelis, con quien, al conocer el conmovedor antecedente que suponía la historia del comandante Todaro (de ahí, por cierto, que no resulte tan naíf, en realidad, la frase de "Somos italianos", sino cargada de intención ante los nacionalistas xenófobos), decidieron investigar sobre ella y, al cabo, escribir un guión de cine. Y no sólo un guión, sino también esta estupenda novela (que no es la novelización de aquel, que conste, sino una obra literaria por derecho propio). La película, por cierto, se estrenó en 2023, con un apropiado y seguramente estupendo, como de costumbre (yo aún no la he visto) Pierfrancesco Favino como el comandante Salvatore Todaro.