La FAMILIA ENLAZADA, un modelo familiar EN AUGE. ¿Cómo formar una familia tras la SEPARACIÓN?

Cómo formar una familia tras la separación.

El libro que cualquier pareja con hijos de otra relación necesita leer. 

Las familias enlazadas, aquellas formadas por una pareja con hijos de otra relación, son un molde familiar en auge. Sin embargo, en la actualidad estos nuevos modelos aún carecen de referentes teóricos y prácticos de los que aprender para que su proyecto familiar sea un éxito y que su familia pueda prosperar en armonía.

Rocío López de la Chica, divulgadora y terapeuta, se divorció después de haber tenido dos criaturas y se emparejó con Miguel Ángel, que a su vez tenía dos hijos de una relación previa. Juntos han creado una familia enlazada. Ambos llevaron a cabo una separación consciente y tras el divorcio se enfrentaron a un gran desafío: enamorarse siendo padre y madre de hijos de relaciones anteriores.

La maternidad revolucionó su vida y experimentó un profundo proceso de autoconocimiento que desembocó en una transformación personal, profesional y familiar, lo que la llevó a fundar Creada-Separaciones Conscientes, el proyecto con el que ayuda junto con su pareja a madres y padres a cuidar de sí mismos y de sus peques durante la separación o el divorcio.

Tras publicar Separada (Destino, 2023), donde su marido y ella contaban su experiencia como padres divorciados de sus respectivas parejas, Rocío López de la Chica publica ahora La familia enlazada, donde ofrece las herramientas para gestionar la nueva familia con una pareja que tiene hijos de una relación anterior, comprendiendo sus particularidades y necesidades frente a una familia tradicional.

Estas páginas surgen de la propia experiencia de la autora, de la necesidad de haber contado con más información sobre las familias reconstituidas durante el proceso para saber a qué retos se enfrentaría emocionalmente. Del mismo modo, López de la Chica recopila seis historias reales de familias enlazadas a las que ha acompañado y asesorado como terapeuta.

De esta manera, La familia enlazada no va dirigido exclusivamente a padres y madres, sino a cualquier persona que mantenga una relación de pareja en la que al menos uno de los dos aporta hijos de una relación anterior.

SEPARARSE NO ES UN FRACASO

En estas páginas, Rocío López de la Chica cuestiona el mito de la media naranja y remarca la importancia de no quedarse en un lugar donde no se está bien, en no anclarse en una relación por inercia cuando está cimentada en un ideal.

Una separación no es algo malo en sí. Lo que puede causar daño es su mala gestión, del mismo modo que una mala gestión de la relación de pareja puede dañar a los hijos e hijas. Es por eso por lo«que subraya la importancia de encontrar paz en la implicación de la ex pareja en la vida de uno después del divorcio, para salvaguardar a los hijos de un posible conflicto de lealtades.

«No somos mitades inconexas que vamos por ahí buscando encajar como piezas de un puzle con determinadas personas. Somos seres completos que evolucionamos y crecemos a través de nuestro propio proceso personal de aprendizaje, que solo termina con la muerte de nuestro cuerpo físico.»

La autora ahonda en las emociones más habituales en un proceso de separación, y rompe con la idea que conceptualiza el divorcio como un fracaso personal que desemboca en un trauma para los hijos.  

De cara a la sociedad, ser madre o padre separados parece incompatible con ser feliz. Existe una expectativa de luto que pareciera que debe guardarse de forma permanente. López de la Chica pone de relieve la culpa que suelen sentir los progenitores respecto a sus hijos, por no cumplir con los ideales propios o con las expectativas de los demás. La autora anima a no juzgar las sensaciones agradables que se van despertando cuando se conoce a alguien nuevo, perdonarse y darse permiso para ser feliz.

«La culpa atrapa e impide avanzar, mientras que la responsabilidad libera y favorece la progresión. La culpa es como el ancla de un barco que echamos en medio de un océano inmenso. El barco se moverá al son de la marea y el viento, pero no se desplazará, permanecerá en el mismo lugar. Por el contrario, la responsabilidad es el motor de esa ancla que la recoge para permitir que el barco avance hacia un nuevo destino, el que su navegante decida.»

«Antes que madres y padres, somos mujeres y hombres, y somos el espejo en el que nuestras criaturas se miran para convertirse en hombres y mujeres. Tu ejemplo debe mostrarles el camino del permiso para vivir sus propias vidas y ser felices.»

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