Abandona ‘Supervivientes’ fulminantemente ante la sorpresa de todos: «Me voy»

Un buen casting lo aguanta todo. Incluso las sorpresas. En un reality como Supervivientes, nada es tan importante como el casting. Los escenarios naturales pueden ser espectaculares y las pruebas tan duras como se quiera, pero sin buenos personajes, no hay historia. Telecinco lo sabe: necesita concursantes capaces de emocionar, enfadar, llorar, competir y aguantar ... Leer más

Mar 26, 2025 - 12:35
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Abandona ‘Supervivientes’ fulminantemente ante la sorpresa de todos: «Me voy»

Un buen casting lo aguanta todo. Incluso las sorpresas.

En un reality como Supervivientes, nada es tan importante como el casting. Los escenarios naturales pueden ser espectaculares y las pruebas tan duras como se quiera, pero sin buenos personajes, no hay historia. Telecinco lo sabe: necesita concursantes capaces de emocionar, enfadar, llorar, competir y aguantar hasta el último segundo. Si un perfil no da juego, la audiencia desconecta.

Por eso cada edición es una apuesta cuidadosamente medida. No solo se elige a famosos con tirón mediático, sino también con capacidad de adaptarse, enfrentarse, sobrevivir… y generar contenido. La televisión en directo exige ritmo, giros y reacciones auténticas, y eso solo se consigue si los concursantes están dispuestos a todo. Lo inesperado, de hecho, es parte esencial del guion.

Eso sí, no vale cualquiera. Hay que aguantar el hambre, el aislamiento, la tensión emocional y, ahora también, las decisiones imprevisibles de la organización. Porque si algo ha quedado claro esta semana, es que Supervivientes 2025 no va a permitir que nadie se confíe. Y la primera víctima ha sido alguien que no se lo veía venir.

Una noche de gala y una sorpresa inesperada.

Los concursantes se quedaron completamente en shock cuando supieron que iba a haber una expulsión en la gala del martes. Las expulsiones suelen producirse los jueves, por lo que el anuncio pilló a todos desprevenidos. Están aún en las primeras semanas del concurso, y ninguno sospechaba que uno de los nominados abandonaría tan pronto. Pero no les quedó más remedio que aceptarlo.

La noche comenzó con las habituales salvaciones, que ya habían tenido su primer capítulo el domingo anterior. En esta segunda tanda, dos nuevos participantes lograron salir de la lista de nominados, reduciendo la tensión entre algunos. Pero justo cuando pensaban que la velada se calmaría, Carlos Sobera soltó la bomba: era el momento de anunciar al expulsado sorpresa.

Carmen Alcayde y Nieves Bolós quedaron como las dos últimas en riesgo, ambas visiblemente nerviosas. “Esta vez, ha sido Nieves Bolós la que se ha llevado la peor parte, convirtiéndose en la nueva expulsada del reality de Telecinco.” Su cara reflejaba incredulidad, y el silencio fue más revelador que cualquier palabra. Nadie se lo esperaba, y mucho menos ella.

Entre la incredulidad y el desconcierto.

La reacción de Nieves fue tan honesta como impactante. Cuando Carlos Sobera confirmó que Carmen Alcayde seguía en el concurso, a Nieves le costó pronunciar palabra. Se mostró seria, perdida, incapaz de asimilar lo que acababa de suceder. Una expresión congelada que hablaba por sí sola.

Carmen Alcayde, lejos de celebrar su permanencia, también se mostró descolocada. Tomó la palabra sin alegría, solo con una mezcla de tristeza y admiración hacia su compañera. «Es de las mejores supervivientes que hay en esta isla, nos cuida a todos, ella merece quedarse mucho más que yo. No me lo creo”, confesó, reflejando lo que muchos pensaban en ese momento.

Nieves, por su parte, habló brevemente. Aún procesando lo ocurrido, reconoció que al principio pensó que era una broma. Cuando ya no había margen para el autoengaño, lo único que pudo decir fue: “No puedo creerlo”. Su salida no fue solo una expulsión: fue un mazazo emocional para todos.

Cuando una isla entera se queda muda.

Si Nieves estaba en shock, sus compañeros no se quedaron atrás. Al volver a la playa y contarles lo que había pasado, la incredulidad se extendió por el campamento. Nadie la creía, ni siquiera cuando ella repetía “me voy” una y otra vez. Solo cuando Sobera reapareció en pantalla para confirmarlo, la realidad golpeó de lleno.