La becaria que demandó a Nacho Cano por 'Malinche' denuncia que está siendo víctima de delitos de odio en las redes
El escrito recoge que la bailarina recibió "comentarios de carácter claramente ofensivo, discriminatorio y de incitación al odio", dirigidos a "personas de una determinada raza"La jueza cuestiona el informe de la Inspección de Trabajo que favorece a Nacho Cano y ordena rehacerlo Leslie Guadalupe Ochoca, la becaria que denunció a Nacho Cano, ha interpuesto una nueva demanda por un delito de odio que se habría cometido a raíz de varios comentarios racistas y ofensivos en redes sociales. El escrito, al que ha tenido acceso elDiario.es, recoge los insultos que la joven mexicana ha recibido en las últimas semanas por su involucración en la investigación contra el productor musical por un posible delito de inmigración irregular y de explotación laboral en su obra Malinche. El escrito recoge que la bailarina recibió “comentarios de carácter claramente ofensivo, discriminatorio y de incitación al odio” por parte de dos usuarios en una publicación realizada en Facebook; y que estos fueron dirigidos a “personas de una determinada raza”. “Pobre muerta de hambre encima de pobre... discapacitada, manos de Tlacuache”, decía el primero de los mensajes. “Esta treintañera además de ser discapacitada, vive una alucinación, ¡eres un hongo!”, publicó el segundo, que añadió: “No vas a bailar nunca para nadie importante por fea, indígena y discapacitada”. La denuncia recoge que este caso “no encuentra amparo ni justificación en el ejercicio de su derecho a la libertad de expresión”. Esta demanda llega mientras continúa la investigación contra Nacho Cano por la situación supuestamente irregular de 17 becarios en su musical Malinche. El último paso del caso fue que la jueza cuestionó el informe realizado por la Inspección de Trabajo –favorable al exmiembro de Mecano– y ordenó rehacerlo. Todavía quedan pendientes declaraciones, como al de los dos policías acusados por Nacho Cano de coaccionar a varios de sus bailarines, y otros dos testigos que fueron imputados por la magistrada. Se trata del dueño del hostal en el que se alojaron los jóvenes, que además es productor del musical y accionista de la sociedad; y el administrador de la Escuela JANA con la que firmaron el supuesto convenio.
El escrito recoge que la bailarina recibió "comentarios de carácter claramente ofensivo, discriminatorio y de incitación al odio", dirigidos a "personas de una determinada raza"
La jueza cuestiona el informe de la Inspección de Trabajo que favorece a Nacho Cano y ordena rehacerlo
Leslie Guadalupe Ochoca, la becaria que denunció a Nacho Cano, ha interpuesto una nueva demanda por un delito de odio que se habría cometido a raíz de varios comentarios racistas y ofensivos en redes sociales. El escrito, al que ha tenido acceso elDiario.es, recoge los insultos que la joven mexicana ha recibido en las últimas semanas por su involucración en la investigación contra el productor musical por un posible delito de inmigración irregular y de explotación laboral en su obra Malinche.
El escrito recoge que la bailarina recibió “comentarios de carácter claramente ofensivo, discriminatorio y de incitación al odio” por parte de dos usuarios en una publicación realizada en Facebook; y que estos fueron dirigidos a “personas de una determinada raza”.
“Pobre muerta de hambre encima de pobre... discapacitada, manos de Tlacuache”, decía el primero de los mensajes. “Esta treintañera además de ser discapacitada, vive una alucinación, ¡eres un hongo!”, publicó el segundo, que añadió: “No vas a bailar nunca para nadie importante por fea, indígena y discapacitada”. La denuncia recoge que este caso “no encuentra amparo ni justificación en el ejercicio de su derecho a la libertad de expresión”.
Esta demanda llega mientras continúa la investigación contra Nacho Cano por la situación supuestamente irregular de 17 becarios en su musical Malinche. El último paso del caso fue que la jueza cuestionó el informe realizado por la Inspección de Trabajo –favorable al exmiembro de Mecano– y ordenó rehacerlo. Todavía quedan pendientes declaraciones, como al de los dos policías acusados por Nacho Cano de coaccionar a varios de sus bailarines, y otros dos testigos que fueron imputados por la magistrada. Se trata del dueño del hostal en el que se alojaron los jóvenes, que además es productor del musical y accionista de la sociedad; y el administrador de la Escuela JANA con la que firmaron el supuesto convenio.
