Ryanair y Transavia, en un lío político por volar desde Dakhla

Desde noviembre del año pasado, tanto Ryanair como Transavia vuelan a Dakhla. Si alguien está absolutamente encantado con la ruta es Marruecos, pero no por los mismos motivos que le impulsan a apoyar los vuelos de Tetuán o de Fes. Dakhla tiene otro significado: es una ciudad del antiguo Sáhara Occidental, reivindicando por el Frente Polisario (Ryanair: inversión histórica en Marruecos para el próximo verano).

Los vuelos de Ryanair van a Madrid y Lanzarote mientras que los de Transavia van a París. En el caso de la irlandesa, es el décimo tercer aeropuerto marroquí que sirve, en una demostración de la fuerte implicación con la política turística del país.

Pero está también lo político: Argelia y el Frente Polisario no están contentos precisamente. Marruecos controla el 80 por ciento del territorio antiguamente español. El Polisario afirma que va a emprender acciones legales porque Ryanair y Transavia vuelan a aeropuertos situados en territorios bajo su tutela legal (por supuesto, físicamente está bajo el control marroquí) y que por ello exigirán el cumplimiento de la ley.

Para Marruecos, estos vuelos son una confirmación de que de hecho Dakhla es territorio bajo su soberanía. Marruecos ofrece incentivos económicos en este aeropuerto. El ministro de Turismo dice que gracias a las ayudas se pudo doblar hasta 47 mil la oferta de asientos. El Tribunal Europeo de Justicia en 2018 estableció que el acuerdo de aviación entre Europa y Marruecos no afecta a estos territorios del Sáhara Occidental.

Las dos aerolíneas dicen que cumplen con la ley.

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