Cómo transformar hueveras en la decoración más bonita para tu cena de San Valentín
San Valentín es la excusa perfecta para llenar la casa de detalles románticos. Pero, en lugar de caer en los típicos adornos de plástico o en los corazones prefabricados de cualquier tienda, siempre es buena idea crear algo con tus propias manos: algo sostenible, económico y, sobre todo, original. La respuesta está más cerca de lo que crees: en la nevera. Sí, porque con unas simples hueveras de cartón puedes hacer una guirnalda preciosa para decorar tu cena romántica, o un cuadro lleno de flores conformando un corazón. Guirnalda decorativa Es cierto que a primera vista, el cartón de huevos puede parecer poco atractivo, pero con un poco de imaginación y unos buenos recortes, se transforma en flores, corazones y pequeñas formas decorativas que, unidas con un hilo, darán un aire acogedor y delicado a cualquier espacio. En Decoesfera No tires las latas de tomate frito: se reconvierten en esta bonita solución para tu terraza Lo mejor de todo es que no necesitas ser un experto en manualidades para lograrlo. Con un poco de paciencia, tijeras y pintura, puedes hacer una decoración única, perfecta para sorprender a tu pareja o ambientar una velada especial. Además de ser una idea original, este tipo de manualidades tienen una ventaja extra: son totalmente sostenibles. Si a esto le sumamos que el coste de los materiales es prácticamente cero, tenemos la fórmula perfecta para una decoración con mucho encanto y sin impacto en el bolsillo. Cúter y pinturas Para este DIY solo necesitas algunos materiales básicos, muchos de los cuales ya tendrás en casa, como hueveras de cartón (mínimo dos, dependiendo del tamaño de la guirnalda), tijeras o cúter para cortes precisos, pinturas acrílicas o témperas en tonos románticos como rojo, rosa, blanco o dorado, pinceles finos para los detalles e hilo, cuerda o cinta fina para unir las piezas. Asimismo, también hace falta pegamento fuerte o silicona caliente para fijar las formas si es necesario, y opcionalmente purpurina, lazos, pequeñas luces LED o cualquier otro elemento decorativo. Lo primero es desmontar las hueveras y recortar cada una de las cavidades donde se colocan los huevos. Estas pequeñas estructuras son la base de la guirnalda y pueden transformarse en diferentes formas dependiendo de cómo las recortes. Una buena idea es recortarlas en forma de flor. De hecho, aquí es donde empieza la creatividad. Puedes cortar los bordes para que parezcan pétalos de flores, darles forma de pequeños corazones o incluso hacer formas más abstractas si buscas un diseño moderno. También puedes mezclar estilos y combinar diferentes formas en la misma guirnalda. Una vez recortadas, llega el momento de pintarlas. Aplica una primera capa de color base y deja secar. Luego, puedes añadir detalles como sombras, brillos o toques de purpurina para un acabado más sofisticado. Si prefieres un estilo más rústico, puedes dejar algunas piezas en su color natural de cartón y combinarlas con otras pintadas en tonos pastel. Cuando las piezas estén secas, haz un pequeño agujero en la parte superior de cada una con una aguja gruesa o un punzón. Luego, pasa un hilo, cuerda o cinta fina a través de los agujeros para unirlas. Puedes espaciar las figuras según prefieras: más juntas para un efecto más recargado o más separadas para una guirnalda ligera y delicada. Otra opción es fijarlas a un mural construyendo, por ejemplo, la forma de un corazón. @bedebrincadeira ❤️ Coração florido
San Valentín es la excusa perfecta para llenar la casa de detalles románticos. Pero, en lugar de caer en los típicos adornos de plástico o en los corazones prefabricados de cualquier tienda, siempre es buena idea crear algo con tus propias manos: algo sostenible, económico y, sobre todo, original.
La respuesta está más cerca de lo que crees: en la nevera. Sí, porque con unas simples hueveras de cartón puedes hacer una guirnalda preciosa para decorar tu cena romántica, o un cuadro lleno de flores conformando un corazón.
Guirnalda decorativa
Es cierto que a primera vista, el cartón de huevos puede parecer poco atractivo, pero con un poco de imaginación y unos buenos recortes, se transforma en flores, corazones y pequeñas formas decorativas que, unidas con un hilo, darán un aire acogedor y delicado a cualquier espacio.
Lo mejor de todo es que no necesitas ser un experto en manualidades para lograrlo. Con un poco de paciencia, tijeras y pintura, puedes hacer una decoración única, perfecta para sorprender a tu pareja o ambientar una velada especial.
Además de ser una idea original, este tipo de manualidades tienen una ventaja extra: son totalmente sostenibles. Si a esto le sumamos que el coste de los materiales es prácticamente cero, tenemos la fórmula perfecta para una decoración con mucho encanto y sin impacto en el bolsillo.
Cúter y pinturas
Para este DIY solo necesitas algunos materiales básicos, muchos de los cuales ya tendrás en casa, como hueveras de cartón (mínimo dos, dependiendo del tamaño de la guirnalda), tijeras o cúter para cortes precisos, pinturas acrílicas o témperas en tonos románticos como rojo, rosa, blanco o dorado, pinceles finos para los detalles e hilo, cuerda o cinta fina para unir las piezas.
Asimismo, también hace falta pegamento fuerte o silicona caliente para fijar las formas si es necesario, y opcionalmente purpurina, lazos, pequeñas luces LED o cualquier otro elemento decorativo.
Lo primero es desmontar las hueveras y recortar cada una de las cavidades donde se colocan los huevos. Estas pequeñas estructuras son la base de la guirnalda y pueden transformarse en diferentes formas dependiendo de cómo las recortes. Una buena idea es recortarlas en forma de flor.
De hecho, aquí es donde empieza la creatividad. Puedes cortar los bordes para que parezcan pétalos de flores, darles forma de pequeños corazones o incluso hacer formas más abstractas si buscas un diseño moderno. También puedes mezclar estilos y combinar diferentes formas en la misma guirnalda.
Una vez recortadas, llega el momento de pintarlas. Aplica una primera capa de color base y deja secar. Luego, puedes añadir detalles como sombras, brillos o toques de purpurina para un acabado más sofisticado. Si prefieres un estilo más rústico, puedes dejar algunas piezas en su color natural de cartón y combinarlas con otras pintadas en tonos pastel.
Cuando las piezas estén secas, haz un pequeño agujero en la parte superior de cada una con una aguja gruesa o un punzón. Luego, pasa un hilo, cuerda o cinta fina a través de los agujeros para unirlas. Puedes espaciar las figuras según prefieras: más juntas para un efecto más recargado o más separadas para una guirnalda ligera y delicada. Otra opción es fijarlas a un mural construyendo, por ejemplo, la forma de un corazón.
@bedebrincadeira ❤️ Coração florido
