Ha llegado la 'skimpflation' a la cesta de la compra (reducción de calidad)

No nos negaréis que desde el año 2021, entre la post pandemia, la inflación y supuestamente la guerra de Ucrania, la vida ha subido un pico y nuestros bolsillos se han resentido muchísimo. Cosas como la energía, los hidrocarburos, los inmuebles, los coches, los servicios, la hostelería, las vacaciones o la alimentación, han sufrido unas subidas en algunos casos delirantes. De hecho, y en lo que a la alimentación se refiere, esas compras habituales que hacíamos al entrar en el super y comprar básicos como pan, leche, yogures, embutido, algo de carne o bebida, antes invertíamos unos 20-25€ y ahora no bajamos de 40€. Hace poco vimos un video de una cuenta de TikTok que comparaba los precios de un ticket de compra de hace 20 años con los precios de ahora, y se veía que en algunos casos la subida era de más de un 300%, muy lejos de lo que han subido nuestros sueldos en estas dos últimas décadas. Ya os hablamos de algo de esto en el 2022 en este post. Realmente no os descubrimos nada, pero lo que muchos no os habréis dado cuenta, es que en el mundo de la alimentación la oferta ha sufrido algunos cambios que han llegado 'de tapadillo' pero que tienen que conocerse. Hablamos de una oferta llena de nuevas variedades, orígenes, al amparo de la 'reduflación', y en muchos casos, de una bajada importante de calidad, lo que algunos llaman ahora 'skimpflation' o reducción de la calidad. Uno de los mejores ejemplos son las frutas y hortalizas. Ya os advertimos que todo lo que os vamos a hablar de aquí en adelante, es de los precios que nos encontramos aquí en Madrid, muy probablemente donde tú vivas, los precios varíen con una muy alta probabilidad de que sean más bajos. Pues empezamos por las patatas, aquellas variedades tradicionales que poblaban los stands en los años 90 y 2000 han ido pasando a un segundo plano, pero de verse, se han estancado en los 1,80€ el kg, siendo otras variedades nuevas las que compiten en precios cercanos al euro. Y lo peor de todo, es que se ve mucha patata francesa, algo que históricamente ha ocurrido por la gran rentabilidad de la misma, pero a cambio se ofrecían precios muy competitivos y eso ya no ocurre. Otro ejemplo que 'raspa' un poco es la cebolla, ésta ha subido más de un 230% en una década, y es curioso porque por mucha sequía que haya habido, y por muchos menos productores que existan en España, no es posible que un producto tan básico y necesario ahora cueste seis veces más. Si de verdad esos los motivos ¿por qué precisamente este producto no se importa? Con la cebolla fresca ocurre algo curioso, ahora se vende en un formato más fino, más tipo 'cebolleta', pero pesando mucho menos que antes y subiendo el producto más de un 30% ¿No os acordáis de las cebollas frescas que se compraban hace un par de años? Ya no las vemos.Cebollas tiernas desparecidas de los lineales (1€ el kg)Sobre los tomates, esto sí que es un verdadero horror. Las variedades de invernadero que nos encontramos no tienen apenas calidad, y si vas a las variedades más tradicionales (Daniela, Pitenza, Eneko, Marmande, tomates rosas etc), el precio no baja de casi 2,5€ el kg. Seguro que las nuevas variedades son más productivas y rentables (resistentes a plagas), pero caray, qué despropósito de tomates, sin sabor, anaranjados, duros y blancos por dentro. Si ya estábamos mal en este tema, cada vez vamos a peor. Otro ejemplo las endibias, en casa somos muy de endibias y ahora las encontramos un 80% más caras que hace un lustro, no entendemos muy bien esta subida tan fuerte. El repollo también lo empezamos a ver a 2€ el kg, una barbaridad pagar por una pieza mediana para un cocido 6€ ó 7€ cuando antaño comprábamos repollos por piezas a menos de 1€. Los espárragos trigueros (de calibre medio) carísimos, fuera de temporada han rondado los 5€ el manojo, algo nada usual, y los espárragos más finos a 3€, una locura, a ver cómo se comportan los precios ahora que entramos en temporada. En cuanto a la fruta, muchos detalles, el pomelo en pandemia costaba menos de 1€ el kilogramo y ahora 1,70€ el kg ¿qué ha pasado para que este cítrico suba un 70%? La fresa, este año la caja ha partido, al menos en Madrid, de los 12€ el kg, estando ahora a unos 7€, el doble que hace sólo unos años. La naranja sigue en ascenso, todavía se ven algunas por menos de 1€ el kg, pero se sigue colando la sudafricana, incluso ahora en temporada española. De locos. O la banana, que si algo tiene de bueno la subida que ha tenido es que ya sin duda no es competencia del plátano de Canarias ya que su precio sobrepasa los 1,50€ el kg, y es el doble que hace un lustro. Por último, los limones, que se han mantenido estables en el precio durante este año, pero mínimo a 2,5€ el kg, cuando en invierno los veíamos en muchas ocasiones a menos de 1€. ¿Os acordáis aquellas grandes crisis de los limones a 3€ hace 15 años?Precios de frutas y verduras en el 2014 (calabazas) y 2018 (plátanos)Hoy sin ir más lejos hemos visto la barqueta de 3 puerros casi a 2,70€, el dobl

Feb 14, 2025 - 10:17
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Ha llegado la 'skimpflation' a la cesta de la compra (reducción de calidad)

No nos negaréis que desde el año 2021, entre la post pandemia, la inflación y supuestamente la guerra de Ucrania, la vida ha subido un pico y nuestros bolsillos se han resentido muchísimo. Cosas como la energía, los hidrocarburos, los inmuebles, los coches, los servicios, la hostelería, las vacaciones o la alimentación, han sufrido unas subidas en algunos casos delirantes. De hecho, y en lo que a la alimentación se refiere, esas compras habituales que hacíamos al entrar en el super y comprar básicos como pan, leche, yogures, embutido, algo de carne o bebida, antes invertíamos unos 20-25€ y ahora no bajamos de 40€. Hace poco vimos un video de una cuenta de TikTok que comparaba los precios de un ticket de compra de hace 20 años con los precios de ahora, y se veía que en algunos casos la subida era de más de un 300%, muy lejos de lo que han subido nuestros sueldos en estas dos últimas décadas. Ya os hablamos de algo de esto en el 2022 en este post.

Realmente no os descubrimos nada, pero lo que muchos no os habréis dado cuenta, es que en el mundo de la alimentación la oferta ha sufrido algunos cambios que han llegado 'de tapadillo' pero que tienen que conocerse. Hablamos de una oferta llena de nuevas variedades, orígenes, al amparo de la 'reduflación', y en muchos casos, de una bajada importante de calidad, lo que algunos llaman ahora 'skimpflation' o reducción de la calidad. Uno de los mejores ejemplos son las frutas y hortalizas. 

Ya os advertimos que todo lo que os vamos a hablar de aquí en adelante, es de los precios que nos encontramos aquí en Madrid, muy probablemente donde tú vivas, los precios varíen con una muy alta probabilidad de que sean más bajos. Pues empezamos por las patatas, aquellas variedades tradicionales que poblaban los stands en los años 90 y 2000 han ido pasando a un segundo plano, pero de verse, se han estancado en los 1,80€ el kg, siendo otras variedades nuevas las que compiten en precios cercanos al euro. Y lo peor de todo, es que se ve mucha patata francesa, algo que históricamente ha ocurrido por la gran rentabilidad de la misma, pero a cambio se ofrecían precios muy competitivos y eso ya no ocurre. 

Otro ejemplo que 'raspa' un poco es la cebolla, ésta ha subido más de un 230% en una década, y es curioso porque por mucha sequía que haya habido, y por muchos menos productores que existan en España, no es posible que un producto tan básico y necesario ahora cueste seis veces más. Si de verdad esos los motivos ¿por qué precisamente este producto no se importa? Con la cebolla fresca ocurre algo curioso, ahora se vende en un formato más fino, más tipo 'cebolleta', pero pesando mucho menos que antes y subiendo el producto más de un 30% ¿No os acordáis de las cebollas frescas que se compraban hace un par de años? Ya no las vemos.

Cebollas tiernas desparecidas de los lineales (1€ el kg)

Sobre los tomates, esto sí que es un verdadero horror. Las variedades de invernadero que nos encontramos no tienen apenas calidad, y si vas a las variedades más tradicionales (Daniela, Pitenza, Eneko, Marmande, tomates rosas etc), el precio no baja de casi 2,5€ el kg. Seguro que las nuevas variedades son más productivas y rentables (resistentes a plagas), pero caray, qué despropósito de tomates, sin sabor, anaranjados, duros y blancos por dentro. Si ya estábamos mal en este tema, cada vez vamos a peor. Otro ejemplo las endibias, en casa somos muy de endibias y ahora las encontramos un 80% más caras que hace un lustro, no entendemos muy bien esta subida tan fuerte. El repollo también lo empezamos a ver a 2€ el kg, una barbaridad pagar por una pieza mediana para un cocido 6€ ó 7€ cuando antaño comprábamos repollos por piezas a menos de 1€. Los espárragos trigueros (de calibre medio) carísimos, fuera de temporada han rondado los 5€ el manojo, algo nada usual, y los espárragos más finos a 3€, una locura, a ver cómo se comportan los precios ahora que entramos en temporada. 

En cuanto a la fruta, muchos detalles, el pomelo en pandemia costaba menos de 1€ el kilogramo y ahora 1,70€ el kg ¿qué ha pasado para que este cítrico suba un 70%? La fresa, este año la caja ha partido, al menos en Madrid, de los 12€ el kg, estando ahora a unos 7€, el doble que hace sólo unos años. La naranja sigue en ascenso, todavía se ven algunas por menos de 1€ el kg, pero se sigue colando la sudafricana, incluso ahora en temporada española. De locos. O la banana, que si algo tiene de bueno la subida que ha tenido es que ya sin duda no es competencia del plátano de Canarias ya que su precio sobrepasa los 1,50€ el kg, y es el doble que hace un lustro. Por último, los limones, que se han mantenido estables en el precio durante este año, pero mínimo a 2,5€ el kg, cuando en invierno los veíamos en muchas ocasiones a menos de 1€. ¿Os acordáis aquellas grandes crisis de los limones a 3€ hace 15 años?

Precios de frutas y verduras en el 2014 (calabazas) y 2018 (plátanos)

Hoy sin ir más lejos hemos visto la barqueta de 3 puerros casi a 2,70€, el doble que hace unos años. Los champiñones de cultivo, otra subida buena, la bandeja del ejemplar pequeño que siempre ha costado menos de 1€ (una media de 0,80€) ahora superamos los 1,50€. No digamos la mantequilla, que somos conocedores de la crisis que hay con ella, subidas de más de un 120% en este lustro, y bueno, un 30% los quesos en general, antes un simple Flor de Esgueva costaba unos 12€ el kg, y ahora es raro que baje de 20€. O la leche, una subida de un 40% en algunas marcas.

Sobre el pescado, qué os vamos a contar, a precio de millón los calamares, los lenguados, las merluzas de pincho (¿de dónde vienen las que se ven a 14€ kg?), y bueno, cualquier pez salvaje, o el marisco, las almejas de calidad. Y la carne, una subida generaliza de sus principales cortes, podíamos hablar de hasta un 30% ó 40%, ya el morcillo de ternera no baja de 17€ el kg cuando ha costado en estos años entre 10€ y 12€. Tampoco se quedan atrás los refrescos, la panadería, la bollería, los dulces... En general casi todo.

Comparativa de precios en dos años (2024-2022)

Si en el 2019 invertíamos en la cesta de la compra una media de unos 200€ (por persona al mes), muy posiblemente ahora invirtamos unos 350-400€, lo que pasa es que mucha gente debe de comprar menos, debe de comprar diferente, mirar mucho más el precio, ir a mercados en vez de grandes superficies, sujetarse de comprar ciertas cosas. Si no, es imposible que todos lleguemos a final de mes. Y esta situación va a ser imposible de revertir y si la cosa sigue subiendo en los próximos años, sobre todo cuando no se cuidan mucho los empleos, habrá una crisis de gran magnitud. 

Y vosotros ¿Qué productos alimentarios habéis visto que han escalado su precio hasta cotas altísimas?

Carlos Dube.