Última hora sobre el estado de salud de Anabel Pantoja tras ser operada de urgencia
Anabel Pantoja, entre la fama y la maternidad. Conocida por su presencia constante en televisión y redes sociales, Anabel Pantoja se ha convertido en una de las caras más familiares del panorama mediático español. Sobrina de la tonadillera Isabel Pantoja, lleva años construyendo su propia identidad al margen del apellido, ganándose una comunidad fiel que ... Leer más

Anabel Pantoja, entre la fama y la maternidad.
Conocida por su presencia constante en televisión y redes sociales, Anabel Pantoja se ha convertido en una de las caras más familiares del panorama mediático español. Sobrina de la tonadillera Isabel Pantoja, lleva años construyendo su propia identidad al margen del apellido, ganándose una comunidad fiel que la sigue por su naturalidad y sentido del humor. Sin embargo, desde que se convirtió en madre en noviembre de 2024, su vida ha dado un giro radical.
El nacimiento de su hija Alma ha marcado una etapa de transformación para la influencer. Entre pañales, noches en vela y decisiones importantes, Anabel ha compartido con su audiencia los altibajos de esta nueva etapa. Lejos de alejarse de la exposición pública, ha seguido abriendo su día a día en redes, aunque con una mirada más íntima y reflexiva.
A lo largo de estos meses, la joven ha compaginado su rol de madre con sus compromisos laborales, desplazamientos frecuentes y eventos sociales. Uno de ellos fue la reciente Semana Santa, que vivió intensamente entre Córdoba y Sevilla, como viene siendo tradición en su familia. Fue al regresar a su refugio en Arguineguín (Gran Canaria) cuando la tranquilidad se vio interrumpida por una nueva preocupación médica.
Una visita al médico que terminó en quirófano.
La creadora de contenido compartió con sus seguidores que había tenido que someterse a una intervención quirúrgica menor. “No duelen pero molestan. Pensaba que eran unos granos infectados, mierda…”, confesaba sin perder el tono desenfadado que la caracteriza. Según explicó, los bultos detectados en su oreja derecha resultaron ser un “quiste de inclusión térmica”, un tipo de lesión cutánea derivada de un piercing mal cerrado.
Anabel relató que el problema surgió tras el parto de su hija, cuando olvidó volver a colocarse los pendientes que se había quitado antes del ingreso hospitalario. “Todo viene del día que di a luz a Alma. Me quité estos pendientes, porque evidentemente me los tenía que quitar, y se me olvidó ponérmelos. A los dos o tres días ya tenía los agujeros cerrados”, explicó. Esa mínima omisión derivó en una molestia persistente que acabó requiriendo bisturí.
Aunque la intervención fue ambulatoria y sin complicaciones, la influencer prefirió esperar a contarlo hasta haber pasado por quirófano. Lo hizo, según dijo, para no preocupar a nadie. Eso sí, quiso asegurarse de que todo quedara estéticamente bien, por lo que buscó un médico especializado en estética facial: “para que después quede bien”, puntualizó con su habitual franqueza.
La salud, un asunto pendiente.
“No he ido antes porque, desde que nació Alma, no le había echado cuentas, pero ese ha sido el problema, que siempre priorizamos otras cosas”, reflexionó. Al acudir finalmente a la consulta, recibió un aviso claro: si hubiese esperado más, las consecuencias podrían haber sido peores. “Me dijo el doctor ‘lo que tienes ahora es como un garbanzo. Si lo llegamos a dejar más, la cosa habría pintado mal», contó desde su casa, ya en proceso de recuperación.
La experiencia ha llevado a Anabel a tomar una determinación importante para los próximos meses, aunque aún no ha dado detalles concretos al respecto. Todo parece indicar que quiere centrarse más en su bienestar personal y en su hija, dejando en segundo plano compromisos sociales o profesionales que no sean estrictamente necesarios. Un cambio de ritmo que muchos de sus seguidores han aplaudido.
Sin embargo, su ausencia en la despedida de soltera de su amiga Susana Molina ha generado cierto revuelo. La influencer no pudo asistir por este problema de salud, pero también por otros motivos que no ha detallado. Su decisión de mantenerse en un segundo plano ha despertado comentarios, aunque la mayoría entienden que, en este momento de su vida, lo esencial es cuidarse.
Preocupación creciente entre sus seguidores.
Este último episodio se suma a una cadena de pequeños sobresaltos de salud que Anabel ha ido encadenando en los últimos tiempos. Aunque ninguno ha sido grave, sí han sido lo suficientemente frecuentes como para generar inquietud entre sus seguidores más fieles. Muchos de ellos han expresado su preocupación por lo que parece ser un patrón repetido de achaques físicos desde el nacimiento de Alma.
El cambio de rutina, el desgaste emocional de la maternidad y la exposición constante en redes sociales podrían estar pasando factura. Por ahora, Anabel se recupera en casa, agradecida por el apoyo recibido, pero consciente de que debe cuidarse más. Y es que, como han señalado muchos de sus fans, la salud siempre debe estar por delante del contenido.