Sopaipillas chilenas tradicionales y versión con salsa de chancaca

Prepara las auténticas sopaipillas chilenas con esta receta fácil y tradicional. Aprende a hacerlas con calabaza y descubre la versión dulce con salsa de chancaca. La entrada Sopaipillas chilenas tradicionales y versión con salsa de chancaca es un contenido original de PequeRecetas

Feb 22, 2025 - 13:15
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Sopaipillas chilenas tradicionales y versión con salsa de chancaca

Si hay algo que no puede faltar en un día de lluvia en Chile, son las sopaipillas. Este pan frito, crujiente por fuera y tierno por dentro, es una receta tradicional que ha pasado de generación en generación. Se pueden disfrutar solas, con pebre, con mostaza o incluso en su versión dulce, llamadas sopaipillas pasadas, bañadas en un almíbar de chancaca aromatizado con especias. ¡Una auténtica delicia!

En este artículo, te enseñaré cómo preparar las sopaipillas chilenas en sus dos versiones: la clásica con calabaza en la masa y la deliciosa sopaipilla pasada con salsa de chancaca. ¿Listo para poner las manos en la masa?

Receta de sopaipillas chilenas tradicionales

Empezamos con la versión más típica, perfecta para acompañar un mate, un té o un café calentito.

Ingredientes

  • 500 g de harina de trigo
  • 250 g de calabaza cocida y hecha puré
  • 1 cucharadita de sal
  • 1 cucharadita de levadura química (polvos de hornear)
  • 50 g de manteca de cerdo o mantequilla derretida
  • 100 ml de agua tibia (ajustar según necesidad)
  • Aceite vegetal para freír

Cómo hacer sopaipillas chilenas tradicionales

  1. Cocer la calabaza: Pela y corta la calabaza en trozos. Hiérvela en agua hasta que esté blanda (unos 15-20 minutos). Escurre bien y hazla puré. Deja enfriar.
  2. Preparar la masa: En un bol grande, mezcla la harina, la sal y la levadura química. Añade la manteca derretida y el puré de calabaza.
  3. Amasar: Agrega el agua poco a poco mientras mezclas hasta formar una masa homogénea. Amasa durante unos 5 minutos hasta que la masa esté suave y lisa.
  4. Estirar y cortar: Sobre una superficie enharinada, estira la masa hasta que tenga unos 5 mm de grosor. Corta círculos de unos 8 cm de diámetro (puedes usar un vaso). Luego, haz un par de pinchazos en cada sopaipilla con un tenedor para evitar que se inflen demasiado al freír.
  5. Freír: Calienta abundante aceite en una sartén a fuego medio-alto. Fríe las sopaipillas por ambos lados hasta que estén doradas (aproximadamente 1-2 minutos por lado). Retira y deja escurrir sobre papel absorbente.
  6. Servir: Disfrútalas calientes, solas o con lo que más te guste: pebre, mostaza, ketchup o incluso miel.
Sopaipillas

Receta de sopaipillas pasadas con salsa de chancaca

Si te gustan los sabores dulces, esta versión de sopaipillas pasadas te encantará. Se sumergen en un almíbar espeso de chancaca, que les da un toque caramelizado y especiado irresistible.

Ingredientes para la salsa de chancaca

  • 250 g de chancaca (o panela)
  • 500 ml de agua
  • 1 ramita de canela
  • 3 clavos de olor
  • Cáscara de naranja o limón
  • 1 cucharada de maicena (opcional, para espesar)

Preparación de las sopaipillas pasadas

  1. Preparar la salsa: En una cacerola, coloca el agua, la chancaca troceada, la canela, los clavos de olor y la cáscara de naranja. Lleva a fuego medio y deja que se derrita la chancaca, removiendo ocasionalmente.
  2. Espesar la salsa (opcional): Si quieres una textura más densa, disuelve una cucharada de maicena en un poco de agua fría y agrégala a la mezcla. Cocina unos minutos hasta que espese.
  3. Sumergir las sopaipillas: Una vez fritas, colócalas en la cacerola con la salsa caliente y deja que absorban el almíbar durante unos minutos.
  4. Servir: Sírvelas bien impregnadas de la salsa y disfrútalas tibias.
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Consejos para unas sopaipillas perfectas

  • ¿Sin calabaza? También puedes hacerlas sin ella, pero la textura será más densa.
  • El aceite bien caliente: Para que queden crujientes por fuera y suaves por dentro, el aceite debe estar a unos 180°C.
  • Evita que absorban demasiado aceite: Asegúrate de que la masa no esté demasiado húmeda y escúrrelas bien después de freír.
  • Para conservarlas: Si te sobran, guárdalas en un recipiente hermético y recaliéntalas en el horno o sartén para que recuperen su textura.

Las sopaipillas son un clásico irresistible de la cocina chilena, ideales para disfrutar en cualquier momento del año. Ya sea en su versión salada o con salsa de chancaca, son una receta fácil, deliciosa y llena de tradición. ¡Anímate a prepararlas y sorprende a todos con su sabor auténtico! ¿Cuál versión probarás primero?

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