Gran preocupación por el estado de salud de Jordi González: tres semanas en coma
Jordi González, rostro conocido de la televisión. Durante décadas, Jordi González ha sido una de las figuras más reconocibles del panorama televisivo español. Su presencia elegante y su particular forma de conducir programas como Moros y Cristianos o Gran Hermano le valieron el cariño del público y el respeto de la industria. Sin embargo, tras ... Leer más

Jordi González, rostro conocido de la televisión.
Durante décadas, Jordi González ha sido una de las figuras más reconocibles del panorama televisivo español. Su presencia elegante y su particular forma de conducir programas como Moros y Cristianos o Gran Hermano le valieron el cariño del público y el respeto de la industria. Sin embargo, tras un largo período alejado de los focos, el presentador ha reaparecido en titulares con un testimonio que ha sacudido a sus seguidores.
Este martes, el programa TardeAR adelantó en exclusiva la portada de la próxima edición de la revista Semana, disponible a partir del miércoles. En ella, el rostro de Jordi González ocupa el centro con un titular que no deja indiferente: «He estado tres semanas en coma». Una frase que revela la gravedad del trance por el que ha pasado el comunicador.
La entrevista fue comentada en directo por Jorge Borrajo, director de la publicación, quien ofreció detalles sobre el delicado estado de salud de González. El periodista explicó que el presentador pasó dos meses ingresado en una unidad de cuidados intensivos en Sudamérica tras ser diagnosticado con una bronconeumonía bilateral severa, enfermedad que acabó desencadenando un fallo renal.
Un cuerpo al límite.
«Ha estado tres semanas en coma, dos meses en la UCI y ha tenido que aprender a andar», relató Borrajo ante las cámaras, visiblemente impresionado por el relato. La crudeza de los hechos evidencia lo cerca que estuvo González de no contarlo, y lo largo y exigente que ha sido el camino de recuperación.
Pese a lo estremecedor del relato médico, el propio González ha decidido abordar esta nueva etapa desde un enfoque introspectivo. Según reveló Borrajo, la experiencia ha supuesto un punto de inflexión en su vida: «Dice que ahora ve su vida de otra manera y que está trabajando para cambiarla». Una afirmación que apunta a un profundo replanteamiento vital.
Entre las frases que más han calado en la audiencia destaca una declaración que condensa esta transformación personal: «Ahora soy más Jordi y menos González». Con estas palabras, el comunicador parece distanciarse del personaje público para reconectar con su faceta más auténtica.
Renacer tras el abismo.
Su reaparición, lejos de ser un simple regreso mediático, sugiere una nueva etapa tanto profesional como personal. González no solo ha sobrevivido a una experiencia límite, sino que está decidido a vivir desde otro lugar, con otras prioridades. Su testimonio se convierte así en un raro ejemplo de vulnerabilidad pública por parte de una figura conocida.
El presentador, que en el pasado fue sinónimo de control y firmeza en el plató, se muestra ahora como alguien dispuesto a dejar ver sus grietas. Su historia no solo interesa por lo que ha sucedido, sino por cómo lo está procesando y compartiendo. En tiempos donde las apariencias pesan más que nunca, su honestidad tiene un valor insólito.
Con esta entrevista exclusiva, Jordi González lanza un mensaje tan humano como poderoso. En una portada que impacta por su franqueza, el veterano conductor nos recuerda que incluso aquellos acostumbrados a los focos pueden perderse en la oscuridad… y volver con una nueva luz.